
Las protestas de docentes y gremios demuestran que la ciudadanía venezolana no está dispuesta ni dadá para una nueva estafa electoral; aún así los candidatuchos de falsa oposición política usan su mafia comunicacional y a sus auto engañados amigos políticos en otros países, para estar une vez más allí prestos y dispuestos, violentando la constitución y la decisión general de los venezolanos, forzando un negocio con la dictadura en pago de la legitimación de un maleante, sobre el que pesan crímenes de lesa humanidad; un criminal solicitado por narco tráfico.
Este es el deplorable panorama que intenta silenciar las voces de las víctimas y poner candado a los presos políticos ignorando los 8 mill de venezolanos desplazados forzosamente por el desastre de un país secuestrador por intereses socialistas (comunistas) y globalistas.
Este es el burdel político venezolano…
Por Jorge Ebrath